Tendrás tantos jefes y jueces cuantas palmaditas necesites en la espalda para hacer las cosas.Es una fortuna contar a nuestro lado con personas que nos apoyen en las decisiones vitales, incluso en aquellos riesgos calculados que debemos asumir para crecer. Más importante aún cuando esas decisiones pueden conducir a aprendizajes costosos.
Mientras más necesites el apoyo de los demás para tomar tus propias decisiones y asumir sus consecuencias, más personas tendrás a tu alrededor para decirte cómo te has equivocado, y mayores dificultades tendrás para decidir.
Ayuda mucho contar con personas significativas (algunas pocas) que te ayuden a pensar, que te empujen a decidir y que te dejen en paz con el pasado, que ni tú ni ellos pueden cambiar. Pero ten cuidado con elegir personas que decidan por tí: comete tus propios errores y no los de los demás. racionalemotivo.blogspot.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario